Foto: Carlos Martínez Ramírez
Hoy 19 de mayo de 2012, el
fotógrafo, escritor y humanista, Carlos Miguel Martínez,
celebra su 87
cumpleaños.
¡Felicidades, maestro!
La obra creativa y
documentalista de Carlos Miguel, se inicia en la primera mitad del siglo
pasado. Su presencia como miembro de la Real Sociedad Fotográfica, no pasó
desapercibida; tratando de romper el paradigma que anquilosaba la fotografía de
Madrid. Estatus conservador sostenido por las juntas directivas homologadas con
el régimen de entonces.
Creó un grupo de trabajo en
el seno de la RSF, conocido como La Colmena.
Esta iniciativa convocó a fotógrafos como: José Pernía, Vicente Nieto
Canedo, Serapio Carreño, Carlos Hernández Corcho, Evaristo Martínez Botella,
Sigfrido de Guzmán, Donato de Blas y Rafael Sanz Lobato. Todos ellos marginados
de no pocos eventos fotográficos.
Estos fotógrafos pertenecen
como otros muchos a La Escuela de Madrid, movimiento que ha dejado una vasta
obra que constituye el documentalismo de toda una época. Nunca es tarde para
reivindicar, una vez más, el NEORRESLISNO HISPANO, tan importante si cabe, como
lo fue el italiano.
Ahora que las nuevas
tecnologías han marcado la dicotomía entre la fotografía clásica y la imagen
digital, es el momento de entronizar la fotografía en la Historia. La obra de los
fotógrafos ya no les pertenece, toma parte de un arte que ha marcado su
clausura. Epatar y emular los trabajos terminales obtenidos a través del
laboratorio químico, con las imágenes digitales es forzar una realidad
pretendida sobre una ficción. Y en algunos casos, una impostura.
Es lamentable que el Ministerio
de Cultura de turno, haya renunciado a la vocación de reconocer, inventariar,
catalogar y divulgar la Fotografía Española del siglo XX. El NEORREALISMO
HISPANO es una evidencia contemplada desde España con recelos, complejos y
prejuicios, con respecto a su homólogo italiano. Además debemos de rescatar la fotografía bajo el franquismo. El
Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, ha presentado una raquítica muestra,
mientras revistas de fotografía francesas ya se hicieron eco a su tiempo.
Además de los fotógrafos que destacaron y hoy son conocidos, debemos constatar
los discriminados por la cultura franquista y post-franquista. Constatando que la
democracia ha sido insensible con los fotógrafos que quedaron en la cuneta.
El documentalismo y la fotografía creativa de
Carlos Miguel Martínez, brilla con luz propia entre una inmensa pléyade de
fotógrafos postergados. La marginación sufrida por aquellos que se hacían
llamar amateur, no evitó que triunfaran
como emprendedores en el campo del fotoperiodismo, la fotografía publicitaria y
en el sector editorial. El fundador de La Colmena creó un imperio de la imagen,
sobre todo bajo el soporte de la diapositiva. En sus baúles conserva el mundo
entero atrapado con su saber mirar y su saber hacer. Los fotógrafos de su
generación se denominaban amateur, no
de aficionado sino de amante de la fotografía. No en balde el vocablo francés
guarda una acepción referida al amante. Amante
de la fotografía.
Recientemente, Carlos
Miguel, ha colaborado junto con otros colegas que aún están entre nosotros, trabajando
en el ensayo histórico sobre la marginación del REALISMO HISPANO. Aportando su
propio testimonio, muy apreciado por investigadores e historiadores. Venciendo
un cierto negacionismo existente en este
hito fotográfico. El pasado año 2011, mientras
este libro-catálogo iba a ser editado por la Dirección General del Libro,
Archivos y Bibliotecas, el Ministerio de Cultura otorgaba el Premio Nacional de
Fotografía, precisamente, a un fotógrafo mencionado más arriba, Rafael Sanz
Lobato. Pero la disolución de las cámaras legislativas, vino a dar al traste
con el proyecto después de estar a las puertas de la imprenta. El actual
Gobierno es obvio que si está derrumbando los pilares del Estado del Bienestar,
no se le pueda pedir peras al olmo.
Este ensayo histórico sobre
el NEORREALISNO HISPANO, estaría arropado por una muestra de fotografías de los
autores mencionados, investigados y documentados. No obstante, el trabajo desarrollado pone una
primera piedra que avivar la esperanza
de que la Fotografía Española, tenga un lugar físico en la Historia. A ello ha
contribuido decisivamente, Carlos Miguel Martínez.
Muchas gracias y
¡Felicidades!
Pedro Taracena
Son "fotos de fotógrafo", cámara incluida. Somos historiadores gráficos, creamos la Magia de congelar un momento de la vida en una emulsión química de un material noble, o en los ceros y unos de un chip virtual. Luz convertida en electricidad, traducida en vida real captada en un soporte visual para siempre. Hemos colaborado a archivar el ritmo de un mundo que cambia segundo a segundo. Somos La Primera Línea. Informamos, entretenemos, nos la jugamos, educamos, desenmascaramos lo indecible, damos esperanza a otros, una voz visual que da contenido a una dinámica imparable. Lo hacemos por amor a nuestro arte y a los demás. En el fondo es pura compasión.
En mi caso evolutivo de imagen detenida a imagen en movimiento y con audio, he llegado a la conclusión de que es un maravilloso y simple proceso. Es mi alma, guiando mi cerebro, a través de mis ojos, conectados a unas manos que no tiemblan transmitiendo esta energía espiritual a mi Cámara. El resultado es la historia de la que otros se enriquecen.
Carlos Martínez Ramírez